
Mirás hacia atrás y piensas en los pasos dados y en los caminos seguidos sin saber en ese momento si fueron los correctos.
¿Te planteas objetivos, sueños que perseguir?
El diafrute está en el sendero de piedras que te lleva a la meta…En esforzarse cada momento para luchar por aquello que visualizas y que ansías obtener.
Cuando terminé Fisioterapia comenzó un camino de elecciones y decisiones complejas para llegar a obtener lo que tenía claro que quería y era dedicarme a la PEDIATRÍA. Sabía que las familias y los niñ@s con necesidades especiales llenaban mi vacío y debía apostar por ello a pesar de que nada fue fácil.
Muchas formaciones para mejorar la práctica clínica, muchas lecturas de libros y artículos, pero sin duda mucha experiencia en ello. Fueron muchos los días dedicados a conocer la pediatría, a pasar horas con las familias y a EMPATIZAR eso que tanto nos cuesta y que rápido aprendí. Aprendizaje e intercambio conjunto sobre las necesidades que profesionales, familias y niñ@s tenemos.
Descubrí la hemiparesia infantil y me entregué a ella en cuerpo y alma, a entenderla y dibujarla y así llegué a proponerme diferentes retos para acompañar a las familias en su viaje y en el mío propio.
Decidí que lo fácil no era para mí que debía adquirir formación en ello, ir de la mano de diferentes profesionales, pero siempre apostando por la calidad y la evidencia en la propia experiencia, construyendo la mía al lado de las familias.
Y luché por el objetivo de la docencia, de la investigación y de la práctica clínica. Salí de mi zona de confort en la que llevaba 10 años para entregarme la docencia y a seguir avanzando en la Fisioterapia pediátrica, un camino hermoso, pero lleno de obstáculos hasta conseguirlo. Lo mejor de todo es que no hay nada imposible cuando te ves en ese lugar y proyectas tus sueños en alcanzarlo y así es, llegas…te detienes y reflexionas: ¿estoy despierta? Síi! No es suerte, ni estar en el mometo acertado. Es tesón, paciencia, esfuerzo, levantarse y caerse una y mil veces pensando que quizá mañana sea el día y sobre todo seguir trabajando con la ilusión del primer día.
Hoy estoy disfrutando de la docencia en grado y postgrado y haciendo visible la unidad de investigación pediátrica con línea específica en hemiparesia infantil donde estoy segura que seguiré disfrutando de compañeros, de un trabajo en equipo y donde entraremos en la vida de las familias que lo necesiten para guiarles y acompañarles en el camino que decidan seguir.
Por eso, no renuncies a tus sueños, no te acomodes si no es tu lugar, sigue tus sueños ellos saben el camino y sin miedo sal de tu zona de confort si así lo eliges!
Pisa fuerte sin miedo, vive tu experiencia con ilusión y empatía y no olvides de dónde vienes y hacia dónde quieres ir. Sé humilde y brilla con luz propia para poder guiar desde la humanidad y profesionalidad.
Siempre tú